Elementos decorativos

Detalle de centro
Añadir al planbook Quitar del planbook
close

Elementos decorativos

Hacia 1938, Manrique, como voluntario en la Guerra Civil española, fue destinado a la agrupación de artillería de Ceuta, donde le enseñarían a disparar. Posteriormente sería enviado al frente de Barcelona, donde fue testigo de algunos acontecimientos que lo marcarían de por vida. Antes del fin de la guerra, le dieron un permiso para volver a Canarias,  una vez allí recibiría la noticia de que la guerra había terminado.

Amargos recuerdos de esta etapa explicarían el enorme rechazo que sentía ante cualquier tipo de violencia y que lo caracterizaron durante toda su vida. El artista siempre evitó a toda costa hablar de estos trágicos episodios pero, de su paso por la artillería quedaría la fascinación por la fuerza latente del hierro, que más tarde transformaría en arte.

En varios de los espacios acondicionados por Manrique vemos elementos decorativos de hierro que muestran esta tendencia, por ejemplo las farolas, papeleras y portón de entrada del Jardín de Cactus pero, quizás el centro más representativo en cuanto a elementos férreos es “Las Montañas del Fuego”.

En el interior de las instalaciones del restaurante El Diablo se nos presentan unas barras circulares a modo de “socos”, como los muros de los paisajes de La Geria, que durante años han sabido proteger las parras del azote del viento. Estas barras robustas y metálicas lucen el color del hierro vivo, combinando con los oscuros tonos rojizos de ceniza volcánica. De iguales materiales, y  repartidas por toda la sala, se alzan férreos sartenes que culminan columnas o paredes. Estos se presentan a modo de lámpara que proyectan su tenue luz por la parte superior, la cual Lázaro Santana (autor del libro Timanfaya) describía como el “fuego doméstico” o la “mancha de aceite”. De entre todas las sartenes destaca una agrupación concentrada en el epicentro circular de la cafetería, donde también observamos los redondos espejos de marco en hierro que conjuntan con el marrón de suelos y tapicería. El suelo de esta pequeña estancia  circular está decorado con radiales en tonos blancos y teja que parecen una metáfora al sol, símbolo de vida y muerte.

Otros objetos de hierro: escultura del diablo, puertas de la tienda y baños, verjas de entrada al restaurante, y parrilla del horno.

Comparte en redes sociales:
VENTA DE ENTRADAS

Información de interés

Comentarios


No hay comentarios

Por favor Logueate para publicar comentarios